Hace poco más de dos meses, WWE anunció que había suspendido a Roman Reigns por 30 días, a causa de haber fallado por primera ocasión la política de bienestar del talento de la empresa. Unas semanas después, se revelaron las sustancias prohibidas que se encontraron en el organismo del ex Campeón Mundial WWE, que fueron la mariguana y la anfetamina, y esta segunda fue la que acarreó la suspensión.
Resulta que gracias a la suspensión de Reigns, los planes creativos que se contaba en esas fechas cambiaron totalmente, según lo que informa el periodista, Dave Meltzer en la más reciente edición del boletín Wrestling Observer Newsletter.
Estas modificaciones se hicieron principalmente por el motivo, de que los funcionarios de la empresa necesitaban colocar otra Superestrella técnica en los puestos principales de Raw y bajar a Reigns unos escalones de la cartelera como castigo.
Y este lugar fue ocupado por Finn Bálor, aunque como les hemos mencionado en el pasado, el luchador irlandés estaba programado para que entrará en una rivalidad contra Chris Jericho, que condujera a un combate entre ellos dos en el mayor evento del verano de la empresa de la familia McMahon, SummerSlam.
Además de que en SummerSlam 2016, presenciaríamos un combate Seth Rollins vs. Roman Reigns por el cinturón.
Otra alteración que hubo en los planes fue, que originalmente el show rojo se iba a quedar con el Campeonato Mundial WWE y SmackDown Live! con el Campeonato Universal, en donde el primer monarca habría sido AJ Styles.
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